¿Cuánto me quiero a mí mismo?

Quizá me dirás mucho o quizá poco o quizá no lo sabes.

¿Crees que sea difícil quererte?

Déjame decirte que no, es fácil quererte, sólo debes ver tus cualidades, tu potencial, tu inteligencia, tu belleza interna y externa, etc.

Desgraciadamente hay muchas personas que se encargan de destruirte psicológicamente y físicamente  y no es porque ellos se quieran, al contrario tienen más problemas de los que te imaginas, pero aparentan tener algo, que es lo que llama la atención para caer en las redes del maltrato, es triste que las personas caigan en esas situaciones y que haya gente que se preste y hasta le de placer humillar y denigrar a las personas.

Los golpes pueden sanar, pero los golpes psicológicos duelen más y tardan en sanar o simplemente no sanan y menos si sigues en ese encierro, el salir de eso es darte cuenta de lo que eres, una vez viendo eso, buscar ayuda profesional, nadie es más que nadie, pero yo como psicólogo te puedo decir que mi experiencia es en el tratado del alma y de hecho la psicología en sí es eso, el tratar a las personas con dignidad y tocando el alma, no con tecnicismos ni por valor, por ética, humildad y profesión.

Regresando al punto del despertar es cuando te comienzas a valorar y ver que las cosas no son como te las hicieron ver, el estar sometido a una serie de insultos, golpes y un ambiente negativo, hay muchas mujeres que se quedan ahí y hablo de que realmente aceptan ser feas, inútiles, gordas y tontas (porque eso dice el agresor) y no tienen el valor de salir porque dicen quién me va a querer, quién me va a aceptar si soy sí, pero en realidad no eres así, eso es lo que te han hecho creer. En otros casos no salen porque terminan muertas a golpes, desgraciadamente la sociedad mexicana es muy machista y los abusos abundan, pero está en nosotros mismos el permitirlo o el salirnos.

Muchas veces desde el noviazgo te das cuenta de los malos tratos, pero caen en la fantasía del voy a cambiar, un agresor jamás cambia, siempre quiere tener a alguien debajo de él, eso nutre su ego y su malicia. 

Casos raros cambian, pero muy raros, pero es importante que sepas que no eres menos, que no dejes que nadie pisotee tu dignidad, tu libertad y tu forma de ser.

Los cambios se deben dar por amor así es como se dan los verdaderos cambios, porque son en conjunto, porque son para favorecer a la persona amada y no  por imponer.

Sé que es algo difícil salir de una relación así o de un ambiente así, esto no sólo pasa en relaciones amorosas, también en familiares y laborales, en todos los casos es complicado, porque vives en una realidad falsa, pero que pasa cuando abres los ojos, la realidad cambia para bien, ojo siempre debes contar con un guía profesional, porque ese despertar te puede llenar de odio por darte cuenta de lo que te hicieron y eso es caer en otro juego del agresor, porque te conviertes en una persona que tampoco eres, llena de odio y rencor y eso no te permite crecer ni darte cuenta de quien te quiera de verdad, porque el poner barreras limita y muchas son por protección hacia ti, pero no sabes cuando bajarlas, siempre las mantienen elevadas y es algo realmente perjudicial.

Y la verdad éste es un tema bastante amplio y un poco personal en cada caso, pero lo que sí te puedo decir es que vales mucho, no estamos aquí para sufrir, ni para depender de nadie, no estamos para permitir abusos de compañeros que no saben que hacer, que de niños no tuvieron la adecuada educación y ahora hacen el mal, de jefes déspotas que creen que por tener un puesto así pueden abusar de los que están abajo, de personas que no valoran una relación y solo quieren mandar y poner sus reglas, tu vales mucho y cada uno de nosotros somos capaces de lograr lo que nos propongamos.

La imagen que puse va muy de acuerdo con lo que comento, dirás es un gato y un león, no, es un gato que ve en él todo el potencial, quizá en apariencia no puede ser un león, pero por dentro se siente así como un león y no para atacar, no, lo que se trata es ser bueno, no violento, pero esa fuerza que tiene el león en el gato que es una criatura indefensa se ve reflejada en las acciones, en los hechos y principalmente en la autoestima, esa es la que te llevará a creer en ti, debes mantener tu autoestima en lo alto y que nadie te diga que eres menos, hablo en ambos géneros, no solo es cuestión de mujeres, también los hombres llegan a padecer esto, es un problema grave que debemos atacar desde la niñez, desde implantar valores y educación, porque al permitir berrinches, no exigir, hacerles todo y no poner límites principalmente genera ese tipo de acciones y más.

El amor es la base de que todo salga bien, la paciencia viene por añadidura y la perseverancia se da con lo nombrado en conjunto. hay una frase que dice "los perros no nacen malos, depende de ti lo que le enseñes se hará bueno o malo", lo mismo pasa con los humanos y no lo tomes a discriminación, es el hecho de que todos nacemos limpios y puros, lo que enseñes es lo que vas a lograr de esa persona, genera golpes y será golpeador, genera insultos y será violento, genera amor y será una buena persona, genera valores y será una persona íntegra, son ejemplos de lo que puedes llegar a formar y nadie sabe ser padres, pero si todos sabemos que hay gente que nos puede guiar y orientar a una mejor formación, que la misma sociedad a influenciado para decir que ir con un psicólogo, psiquiatra o  pedagogo , es por estar mal, locos o creer tener la razón. Pero no es así el ir con un especialista de la salud física y mental, es por quererte, por entenderte aún más, por crecimiento y porque quieres hacer bien las cosas, repito la profesión de uno como psicólogo es entender, tratar el alma, limpiar, renovar y mantener ese nuevo ser que sólo traerá beneficios. 

Rompe con ese protocolo de  maldad, de malos tratos y quiérete, vive y deja vivir, no hagas el mal, ya hay suficiente como para seguir en lo mismo, cambia y deja que los demás cambien, recuerda que la vida te puede cobrar una factura muy cara si haces mal, reacciona y genera una nueva que te traiga beneficios y algún día puedas vivir sin remordimientos.

Saludos

Psic. Juan Carlos Calderón Bandera